La estrella de fútbol americano Tom Brady, quien se alzó este 7 de febrero como campeón del Super Bowl con Tampa Bay Buccaneers, al derrotar a Kansas City Chiefs, ha logrado construir un patrimonio junto a su esposa, la modelo brasileña Gisele Bündchen, de más de mil millones de dólares.
Tras su séptima victoria del campeonato de la NFL, el MVP celebró con un gran beso de su pareja su nuevo título. Por supuesto, al juego también asistieron los tres hijos del jugador: dos en común con su actual mujer y uno que procreó con la actriz Bridget Moynahan.
Inicio de un romance rodeado de una polémica
Pero antes de establecer una familia, ambos al principio no lo tuvieron tan fácil. Luego de que la topmodel comenzara a salir con la Brady, Bündchen se enteró que el de California esperaba un hijo con su exnovia, Moynahan. Sin embargo, la famosa decidió darse una oportunidad con el quarterback en 2006; pero, sin duda, la espera del niño que estaba en gestación la movió.
Así lo hizo saber en su libro autobiográfico My Path to a Meaningfuk, en el que reveló: “Dos meses después de iniciar nuestra relación, Tom me dijo que su ex estaba embarazada. Al día siguiente la noticia estaba en todas partes, y sentí que mi mundo se había puesto patas arriba”.
Una vez superado el escándalo del embarazo, la brasileña y el estadounidense decidieron darle rienda suelta a su amor. En 2009 se casaron en Santa Mónica, California. Por su parte, el primogénito del mariscal de campo nació en agosto de 2007 y según la exángel de Victoria’s Secret, la llegada del bebé que ahora tiene 14 años de edad produjo “que su corazón se expandiera de una forma que no sabía que era posible”.
Con el paso del tiempo, la pareja se consolidó como uno de los matrimonios más estables y existosos del entretenimiento. Y es que tras fichar con los Bucks, Brady, de 43 años, consiguió firmar el mejor contrato de su carrera en la NFL. Recibe aproximadamente 40 millones de dólares al año, incluyendo el sueldo que recibe por Tampa Bay, además de sus proyectos publicitarios. En consecuencia, el ganador de siete anillos del Super Bowl acumula una riqueza de 525 millones de dólares.
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Por su parte, Gisele de 40 años, la modelo internacional más cotizada y mejor pagada durante 15 años consecutivos, cuenta con una riqueza de más de 800 millones de dólares, superando así a su esposo por 275 millones.
A pesar que existen parejas que tienden a separarse porque uno gane más que el otro, claramente este no es el caso de Gisele y de Tom. De hecho, de acuerdo a medios internacionales, el matrimonio tiene pensado un gran proyecto familiar. Quieren construir una mansión en una zona lujosa de Indian Creek Miami, en donde viven famosos como Enrique Iglesias o Ivanka Trump. Se comenta que hicieron un desembolso de 17 millones de euros por una residencia de 465 metros cuadrados.
Una mansión ecológica
El plan que tienen pensado los esposos apunta que la residencia será inspirada en el vanguardismo pero también en la ecología. Esperan de que puedan contar con espacios naturales que les permitan cosechar y tener su propia comida orgánica. También lo hicieron en sus propiedades antiguas con criaderos de gallinas para poder alimentarse cada mañana con huevos no procesados.
Tom Bryde y Gisele Bündchen, una pareja filantrópica
Más allá de los lujos que cada uno se dé y entre los dos compartan, los famosos también utilizan sus riquezas para el beneficio de terceros. En el caso de Bündchen ha colaborado durante mucho tiempo con la ONU, en proyectos para salvar en Amazonas en Brasil y en otras campañas. Mientras que Tom Brady donó más de ocho millones de dólares entre la investigación de cáncer, hospitales y países del tercer mundo como Haití.
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