La carrera de Alcides Escobar dio un giro inesperado en 2018. Pasó de ser el campocorto titular de una organización que recientemente ganó un campeonato en las Grandes Ligas, a un pelotero que aceptó un contrato de ligas menores para mantenerse con empleo. Así de drástico fue la caída del pelotero que estuvo en el Juego de las Estrellas en 2015.
Curiosamente, ese no fue el fondo de Escobar. Durante toda la temporada de 2019 la pasó en la sucursal Triple-A de los Medias Blancas de Chicago, un mensaje que le llegó con contundencia y que lo obligó a explorar nuevos mercados en el beisbol.
En nativo de La Sabana, firmó en 2019 un contrato con los Orioles de Baltimore y fue dejado libre en los Spring Training. Poco después pactó con los Medias Blancas de Chicago, pero luego de iniciar en Triple A, fue despedido en agosto, sin siquiera recibir un llamado a las Grandes Ligas.
Ya con ese año fue bastante claro que la carrera necesitaba algo diferente. Dejó en pausa el deseo de volver a las Grandes Ligas y aventurarse a Japón, circuito que le permitió reencontrarse con la exigencia deportiva.
Las Golondrinas de Yakult contrataron por una temporada a Alcides Escobar, la única opción que recibió para jugar en un circuito competitivo y que le iba ayudar a mantener la forma para ayudar a un equipo a conseguir victorias. Después de todo, en las ligas menores el principal enfoque es desarrollar el talento de los prospectos y no conseguir triunfos.
Fue un paso medianamente positivo, porque Escobar mostró que todavía podía ser un bateador productivo. Ligó para .274, con slugging de .452 y OPS de .762 que, sumado a sus virtudes defensivas, es un rendimiento que cualquier organización podía aprovechar en un nivel competitivo.
¿Regreso a casa? Kansas City no abrió sus puertas
Separaron sus caminos, pero el amor fue más fuerte. Alcides Escobar firmó contrato de ligas menores con los Royals, lo que marcó su regreso a la organización de Kansas City luego de tres años en otras organizaciones y otros circuitos del beisbol profesional.
Al menos era lo que parecía. Escobar estaba nuevamente en una organización en la que creció como jugador y se estableció como pelotero de todos los días en las Grandes Ligas. Además, con un equipo en reestructuración que debería darle oportunidades para jugar.
“Solo estoy feliz de volver a mi casa”, declaró Escobar a MILB.com. “Cuando mi agente me dijo antes de firmar que podía regresar a Kansas City… sí. No debía pensar más nada en lo absoluto. Simplemente le dije que sí”.
Y parecía que iba a segundo matrimonio feliz. Alcides Escobar bateó para .274, con cinco cuadrangulares y 16 carreras remolcadas en 35 encuentros. Además, consiguió un OPS de .762, por lo que mostró que esa ofensiva que exhibió en Japón se mantuvo en los Estados Unidos. También con buena defensiva tanto en el campocorto como en la segunda base.
Pero la unión se terminó rápido. Kansas City demostró que el venezolano no tenía espacio en su róster de las Grandes Ligas, por lo que decidieron cambiarlo por “dinero en consideración” para finiquitar la separación de cuerpo.
“Solamente me puedo enfocar en trabajar en la caja de bateo y tratar de mejorar en otros aspectos en el campo. para cualquier oportunidad que se me presente, estaré listo para el reto”, declaró Escobar mientras estuvo en las ligas menores.
Alcides Escobar recibió confianza en Washington
Un chance le llegó y fue desde Washington. Los Nacionales adquirieron a Alcides Escobar para que fuera un jugador que aumentara la profundidad del equipo y jugara esporádicamente en el cuadro interior. Fue el regreso a las Grandes Ligas del pelotero que ahora tiene 34 años de edad.
“Escobar es un veterano estuvo en la Serie Mundial”, declaró Dave Martínez, mánager de los Nacionales. “Jugó mucho segunda base en los últimos meses, incluso su último periodo en Triple-A. Vamos a tratar de usarlo porque necesitamos un poco más experiencia en esa posición y él la tiene”.
Es ahí cuando tener a un veterano como el venezolano puede ayudar. Seguramente perdió condiciones que lo llevaron a ser el primer bateador de aquel equipo que ganó una Serie Mundial de las Grandes Ligas y estuvo considerado entre los mejores torpederos defensivos del beisbol, sin embargo, todavía cuenta con las intangibles para colaborarle a Mike Matheny, estratega del conjunto.
Ahora Alcides Escobar es un beisbolista de 34 años de edad. Lejos quedó ese tiempo de prospecto o figura que estuvo en el Juego de las Estrellas, sin embargo, en Kansas City apuestan a que su recorrido por numerosos niveles pueda fungir como tutor de uno de los equipos con más juventud en la zafra actual.
El resumen curricular de Alcides Escobar en las Grandes Ligas no es fácil de ignorar. Tiene galardones importantes individuales y mucha importancia en el cumplimiento de un objetivo colectivo, por lo que su regreso al beisbol organizado es una de las noticias que ocupará un espacio importante entre las informaciones actuales.
